Un Valle lleno de tradición
Maravíllate ante la riqueza de un bello y amplio patrimonio, acumulado a lo largo de los siglos, que es en sí mismo un tesoro. Caerás rendido ante la impresionante Basílica de Nuestra Señora de la Asunción, declarada Monumento Nacional, que es un bello ejemplo de mezcla de arquitectura gótica, renacentista y barroca, llena de magníficas obras de arte y de misterios ocultos. La Plaza Mayor, con sus edificios renacentistas del Ayuntamiento y Posada Massó, ambos declarados Bien de Interés Cultural; el antiguo Pósito y Cárcel Real, con su Torre del Reloj; y para cerrar el conjunto monumental, Villa Enriqueta, un palacete de 3 alturas, que combina el estilo neo-mudéjar y el modernismo.
Sumérgete en un paseo por plazas y calles donde encontrarás varias casas señoriales de los siglos XVI, XVII y XVIII, con escudos y blasones, portadas de piedra, balcones y rejas, hasta llegar al Convento de Santa Ana, fundado en el S.XIII por Santa Teresa de Jesús. Tras las Huellas de Teresa también llegaron los Carmelitas Descalzos. De ellos queda la grandiosa Iglesia del Carmen, que refleja un estilo de “arquitectura carmelitana”.
Villanueva de la Jara pionera en el cultivo del champiñón y las setas, que junto a otros platos populares, podrás degustar y combinar perfectamente con los excelentes vinos de la tierra.
Las puestas de sol son todo un espectáculo de fuego y luz en la llanura manchega, invitándote a quedarte y descansar en la villa, la mejor despedida para un viaje marcado por los pequeños placeres.
Existe un excelente servicio de Guía Turístico en la Oficina de Turismo Municipal de Villanueva de La Jara, localizado en el pasaje de la Posada Massó.